El barrio de Chelsea vivió una noche de celebración
Aunque han jugado en escenarios mucho más grandes, ningún trofeo europeo es menor para ellos.En esta ocasión, Maresca y su plantilla lograron elevar la Conference League tras vencer al Djurgarden, un rival que pocos esperaban que llegara tan lejos. Los Blues buscarán coronarse en Polonia para completar un triplete europeo: ya tienen la Champions y la Europa League, ahora quieren sumar la Conference.
El equipo londinense celebró sin conocer aún a su oponente en la final, ya que Fiorentina y Betis todavía estaban en juego. Se avecina un reencuentro o un clásico sevillano para Enzo Maresca y su Chelsea.
Lo que enfrentará a su próximo rival será muy diferente a lo visto en el Stamford Bridge el jueves. Maresca realizó rotaciones para priorizar el compromiso importante en la Premier contra el Newcastle, buscando asegurar su lugar en la próxima Champions League. La figura destacada del once fue Reggie Walsh, de solo 16 años. El joven jugador debutó como titular por primera vez.
El Djurgarden intentó sorprender con un aviso inicial sin demasiado peligro, pero el Chelsea dominaba con posesión del balón, gestionada principalmente por Marc Cucurella. Aunque habitualmente aparece como lateral, Cucurella se ubicó en el doble pivote frente a Reece James, otro lateral adaptado al medio campo.
A los treinta minutos aproximadamente llegó la primera oportunidad clara. Un rechace tras un intento fallido de George por ingresar al área terminó en los pies de Dewsbury-Hall.El mediocampista se enfrentó a Jacob Rinne, quien respondió con garantías ante una situación poco habitual para él. Poco después tuvo que realizar otra parada espectacular con el pie ante George. La asistencia fue del joven Walsh, quien mostró gran visión desde muy temprano.
A pocos minutos del descanso, el Chelsea ya había asegurado su clasificación. Tras varias ocasiones fallidas, George y Dewsbury-Hall concretaron el gol que puso fin a las esperanzas del Djurgarden. El delantero aprovechó un pase preciso para definir ante Rinne, quien no pudo hacer mucho más. Para Maresca fue suficiente para dejar fuera a Cucurella durante los primeros 45 minutos tras una actuación sobresaliente en una posición poco habitual para él.
La segunda mitad inició con intercambio de oportunidades, mostrando un Djurgarden orgulloso y combativo. Miro Tenho logró conectar un buen centro dentro del área blue que obligó a Jorgensen a realizar una gran intervención similar a las que dejó en Villarreal. También hubo otra buena parada ante un disparo desde fuera del área de Stensson. El Chelsea mantuvo su dominio del juego; incluso George estuvo cerca de marcar tras un remate que fue anulado por fuera de juego. Dewsbury-Hall también tuvo chances claras para ampliar la ventaja pero no logró concretar más goles. La renta era suficiente y los aficionados visitantes disfrutaron cada momento como si fuera una fiesta bajo la atenta mirada de Rafa Benítez presente en las gradas.
Puedes estar seguro de que los londinenses se preparan ahora para centrarse en disputar la próxima Champions League. La final será el 28 de mayo en Polonia frente al Betis, dirigido por Enzo Maresca —una leyenda sevillista— lo que añade un toque especial al encuentro entre estos dos equipos históricos. Este será el octavo enfrentamiento entre ambos entrenadores: con tres victorias para Maresca, dos empates y dos derrotas.